jueves, 29 de marzo de 2012

escenae

El escenario no es para cualquiera. Por eso yo a veces me pregunto qué hago acá. En frente de tanta cantidad de gente, que como en la vida, sólo una pequeña porción de ellas valen la pena. En el teatro todo el público vale la pena. Pero la metáfora de la visibilidad me deja tejer una analogía con las personas con las que compartimos todo el espacio vital del mundo y esas primeras filas que son las únicas que ves desde el escenario. Otra de las características que la actuación nos permite descifrar es el hecho de sentirse protagonista. Tanto en el escenario como en la vida. Quizas a veces nos confundamos y pensemos que actores secundarios de nuestra historia merecen nuestro cuerpo o nuestra posesión (llámense parejas, familiares, amigos) pero mas allá de todo, el ego centrum capitae vitalis es uno mismo...

infame

Astor estaba seguro de que iba a morir a causa de un balazo infame. Lo azotaban seguido malarias en el higado y glandulas anexas. Las anginas se tornaban mas comunes. Lo que mas le preocupaba era la vista y el posible glaucoma heredado. Tenia un par de operaciones encima. A veces solía ser descuidado pese a tambien, considerarse temeroso. Pero estaba casi de lleno convencido que un balazo (infame) iba a apagarle el cuerpo y la sinapsis q lo dejara sentir. Un balazo casi siempre es infame. Pero la infamia del balazo Hadeico de Astor rebalsaba lo terrenal. Era casi una casualidad desafortunada. Como encontrarse a un conocido que no nos cae del todo bien. Como un gol en contra en el último minuto que nos elimine de la copa.
Lo interesante es que no vivía pendiente en la espera de ese balazo, aunque de algunos callejones erráticamente nacen premoniciones macabras que al poco soplar del viento se van diluyendo.
Los dolores de cabeza aumentaban una noche de abril y la madrugada fue un espanto. Extrañaba los anteojos de sol de su Marshita, una amig a muy cercana a Astor, fotógrafa y dibujante. Tambien sabía tocar bastante bien la guitarra.
Casi todas las noches que soñaba con el mismo, tenía esos lentes puestos.
Esa noche de abril balbuceaba entre sueños, deliraba por la fiebre. Le decía a sus padres que los amaba, como siempre pero a gritos entre sueños.

padre

El arte de un buen lavado de cara. (Por mi padre)...

Primer elemento casi fundamental, un lavabo con una canilla. Que de la canilla salga agua, ya que de lo contrario el procedimiento podría llegar a verse trunco. Cabe aclarar que se ha observado realizar este accionar tambien, en ríos, piletas y hasta en baldes rojos y palanganas metalicas. (No se prometen los mismos resultados)
El primer paso es abrir la canilla y que el chorro salga con fuerza. Desde 'casi al maximo' al 'maximo'. Nunca menor a 'casi el maximo'. Se recomienda encarar este paso con un desinteres total, como si el agua no fuera un bien que escasea. (Recordar que en los tiempos en que EL aprendio este arte, era una locura pensar que el agua algún día podría faltar).
Como todo, o casi todo ritual, hay un sacrificio. Repetimos; en este caso, es el agua la sacrificada.
Una vez que el vehemente chorro choca con el piso del lavabo, se considerara darle unas palmaditas. De calidad. Evitando que salpique agua contra uno. A la vez sirven de termómetro corporal. La temperatura es de 'fria' a 'helada'. Incluso en invierno. Nunca mas que 'helada'. Nunca menos que 'fría'. Recordemos que el rito, además de caracter higiénico, es de preponderancia, despabilatorio.
El encorvado del cuerpo es una técnica bastante especial. Aunque se torna algo personal al encontarnos con personas de diferentes tallas y necesidades. Lo ideal es amoldar el cuerpo de manera tal que ni el ciático ni el lumbar chillen.
La cara a unos pocos centímetros del caudal descendente. Las manos simétricas en forma de palas excavadoras. (No confundir con palas manuales de tierra). Las palas deben tomar el agua y golpearla frente a la cara. La cara a su vez intentará penetrar las manos. Como zambuyéndose a un río fresco en una tarde de verano catamarqueño. Se realizará por cada 'choque' una respiración (fuerte) de tipo exhalatoria buco-nasal. Sonora si se puede. Repetir el proceso unas cinco veces. (No mas de ocho). Mirarse el espejo en su justa medida. Empezar el dia silbando, asi...

comparación

Habia veces que veia al amor tan imposible como hacerle entender las cosas a los padres. Extenso lamento...

miércoles, 28 de marzo de 2012

cigaro

El fiel lugar de compañero del cigarrillo. Nos hace compania en las difíciles y en las ganadas. Nos hace socializar, o aislarnos y sentirnos únicos. Nos besa en las buenas y en las malas. Nos llena en la paz y y nos relaja en la tensión. Nos ayuda en el hambre y nos protege en el frío. Nos contesta en la locura y nos enamora de ellas. Nos refleja en otros, nos hace odiarnos. Y pese a todo, y gracias a lo mismo es porque lo quiero. Si tan sólo a veces no me molestara el rastro de su aroma en la ropa, sería una especie de perversión la que tuviera. Algo asi como cigarofilia.

miradas

Y no entendía el discurso de un político porque no le llegaba a donde el quería que llegase. A ese sector de el, donde algo activaba y tomaba un matiz profundo. Necesitaba que le hablen, pero era mas placentero cuando, de nuevo lo digo, le llegaba. El método era así... Analizar las palabras del parlante ser de enfrente. Comerle el cerebro con una serie de preguntas y así seleccionar tras una serie de concretas asociaciones, el color del ser. Claro que la mirada era primordial en ese trabajo, y para detectar el color del alma se prioriza interpretar esa mirada cromáticamente.
A modo de guía; pequeña serie de tips para lograr ver el color de miradas (sin importar el color de ojos).
De rojo a azul. Son los extremos.
No hay malos ni buenos... El azul es la mirada perfecta en este subjetivo método yoico (tan mío como mi alma. Tan personal como mis palabras)
Las miradas azules son puras en escencia. La pasión prevalece en ellas. Son extensas y pacientes. Pensantes como el mar. Miradas de charlas de café de sonrisas correspondidas.
Un tono mas abajo las celestes, con algunas inseguridades mas. Temor a lo incierto en busca de otra mirada y con tendencias amarillentas. Tímidas al tacto.
Las verdes suelen ser casi perfectas. Con el ego en su lugar aunque a veces escondido. Tienden a la autodestrucción por épocas y a apasionadas charlas.
Las miradas amarillas son miradas en maduración. Tienen en sí cierta pasión pero les falta enfocar los objetivos. Cierta toxicidad sigue alimentándolas en sus auras.
Las miradas naranjas son rencorosas. La pasión pasa a un segundo plano y se subleva lo irrisorio de las opiniones ajenas. Son pálidas.
Las rojas tienen mucho odio. La pasión es su odio, y su motor una venganza hacia algo que desconocen. Resentidas miradas estas. Buscan y esperan demasiado. Erran en el camino.
Esto es sólo una guía y lejos de ser una suerte de horóscopo, debe entenderse que no se pude ver el color de cualquier mirada. Sino sólo de aquella que se quiera dejar ver.

martes, 27 de marzo de 2012

blanco

Era un hermoso día para esos bichitos blancos chiquitos. Claro si era otoño! Debe ser una linda época para observar y acariciar a esas criaturas dóciles y hermosas. El frío la/s achicaría mas? Se volvería/n más blanca/s? Se dejaría/n proteger por mi/s mano/s?
Respuestas que el viento no da... y bueno, el tiempo... suele traer hojarascas, o sonrisas.

lunes, 26 de marzo de 2012

ojitos

Por suerte nunca nadie me había llamado así. Y es que en verdad es una especie de casimolestia, mezcla con vergüenza y post-discurso en contra cada vez que se hace alusión a los ojos, y no a la mirada. Como todo lo que se relaciona con la belleza física no es mas que puro azar genético, los ojos no son la excepción. En 'mi' predilección, es necesaria, si es que la fuera a haber, una alabanza, o mas que nada un halago a la forma. Obviamente la mejor observación sería leer la mirada o mejor aún perderse en ella. Pero hablando de lo físico, la forma me parece relevante. O el acompañamiento de cejas y pestañas en composé. Pero le gente admira el color. Y más cuando es claro. Yo amo los ojos negros y marrones. Muchos ojos claros me gustan pero al tener yo un par de esos les tengo idea.
A la vista suenan a agua salada. O sea tres sentidos en un ojo! Pero son tan débiles!
Hablo de los mios que son los ojos que mas suelo usar...
Se vuelven locos con el sol y manchitas blancas suelen tapar partes de la escena. La luz artificial y de las pantallas los alteran y pueden juntarse con el hígado de un fin de semana agitado para darte los peores dolores de cabeza. El cloro los irrita al punto de volverse rojos punzó, pero furiosos! El viento los hincha cuando les tira tierra o arenilla, o aire mismo. El frío los achina. El humo, aunque hay de diferentes simpatías para ellos, los hace arder en llamas. Y llorar, eso depende del color de la mirada.
Fue gracioso lo de ''ojitos''. Nunca pensé que me podrían llamar así. Por eso te pedí, les pedí, que me llamen Victor. Y ahí empecé a darme cuenta de que me gustó mi nombre.

jueves, 22 de marzo de 2012

otoÑom!

“Empieza el otoño y los árboles se vuelven amarillos, rojos, castaños; es como si el pequeño balneario estuviera rodeado por un incendio. ”…
“Sabía que era capaz de defenderla hasta el último aliento, que era capaz de dar su vida por ella… Pero aquella sensación de amor que le impedía respirar no fue más que un destello de impotencia que apenas duró un segundo, porque su mente estaba completamente repleta de angustia y de miedo”.

Una poquita de La Despedida de Milan Kundera
(El que echa a perder su despedida poco puede esperar del reencuentro.)









COMO

COMO SI nada de lo demás tuviera influencia en lo de antes. Como si todo.
Difícil explicar pero a la vez ya estaba todo dicho en los anteriores cortos escritos. Era como (esto) una emancipación mental de esos deseos de no estar asi. Enojos ya no mas, pero despues, la tristeza es mas fácil. Como mas accesible en el otoño lindo este. Y bueno. Mañana será otro día; quizás de guitarras, quizás gris. Pero no espero nada porque de lo que se espera se sufre.  Y mas que nada eso...

bailaR

Música en cada paso y no necesariamente hablando de baile. Si bien el debate que teníamos (en el que las dos partes tiraban para el mismo lado) consistía en la necesidad de bailar para una plenitud física y mental. Como un elixir de felicidad que sólo unos pocos conocen.
La música suena mas y mas fuerte y las piernas se aceleran con el ritmo, y tambien desaceleran. Es inevitable no seguirla. Tango, balcánica, rock, lambada, vida. Todo es un gran baile y las miradas fijas en los pies y en el cuerpo entero. Miradas de jurado. Vista inquicidora de las personas oscuras que se fijan mas en los compases que pisoteas que lo que acontece en sus propias narices. Y se hace insano, casi bullicioso. En realidad casi insoportable, sofocante, vomitivo, asqueante. Los jueces entonces te señalan con el dedo y ya no hay mas nada que decir, ni que bailar. La pieza ha terminado pero el baile sigue. Y hay que bailar cuando uno está solo, pero hay que bailar mas cuando te ven, te juszgan. Ahi vas a brillar si tenés luz. Si sos vos. Bailar vivir. Bailar brillar.

menbial

Astor se sentía inoportuno. Una lástima esa limitacıón que se autoimponía! Tan joven de cuerpo y tan melancólico últimamente...
Pero su aparato sentimentor actuaba asi. Las veces que sentía olor a Burzaco y las colchas de la tía María, sabía que podían ser el fatídico comienzo de los casibajones. Otro síntoma frecuente era una blasfema sensación de abandono por parte de todos. Hasta del chofer del 39 que le entendió 'uno veinte' en vez de 'uno venticinco'. Decí que duran poco, los casibajones, y que por lo menos no molestan a nadie. Es atractivo el hecho de olvidarse de lo malo frente a los demas. Astor agregaría sin duda eso a su curriculum vitae.
Lo mas llamativo y a la vez pendulante era la respuesta al 'cómo te sentís'. Estaba bien dentro de todo. Estaba bien pese a querer a alguien mucho y sentir otro límite que 'engañaconsideraba' necesario. Pero pese a eso sentía tranquilidad.
Es verdad que a veces temblaba en estado normal, siendo ese tic un rasgo de los besos lindos que solía dar; ahora fumaba sentado y temblaba como esos perros de bolsillo, sin pelos y famélicos.
Consideraba el hecho de morirse en cualquier momento de un ataque al corazón, o peor aún, de un infarto de pensamientos. Es que Astor no estaba mal. Sólo experimentaba antiguas marcas de la memoria. Los oasis de vez en cuando lo embriagaban. Pero tampoco intentaba buscarlo...

miércoles, 14 de marzo de 2012

NeceSidadeS


inconclú

y cada vez q te veo pasar una cachetada me pone en mi lugar.
y cada vez q te veo bailar. me siento a observarte y tu ritmo me invita a pasar.
y terminamos tirados en el pasto. y terminamos unidos en el mar...
y terminamos oscuros en tu cuarto, secreto a medianoche, q mas puede pasar.

y las personas estamos destinadas, a hacer las cosas como a uno se lo ocurra
para q nadie se arrepienta de nada... para la (aca se me habia terminado la inspiración y Julito me tentó a leerlo)
SALUDOS!

lluviador

improvisados atletas... La técnica inexistente. Cualquier techo salva al corredor.
Huyen a algo que piden. La lluvia es un milagro cuando no está, pero después molesta...
-quién carajo entiende a estos malnacidos? dice el Dios de la Lluvia.(Uno de los Dioses mas puteadores)
Les quema el agua? Por qué no frenan a disfrutar de las gotas? No se dan cuenta que cada una es diferente?
Por qué no escuchan a la lluvia? No se dan cuenta de que canta?
-No son mas boludos porque van apurados! Retruena el Dios puteador.
Y entre puteadita y puteadita... el granizo irrumpe en la ciudad.


Sílice

la palabra era entre frágil y sensible. El sentimiento entre tristeza e impotencia.
Lo sublime era la lluvia. Lo terrible era la necesidad de ese estado.
Pocos supieron detectar lo diferente de la mirada.
Los que preguntaban no comprendieron lo primitivo de la necesidad.
Los murmullos siempre hacen llegar las noticias a las mas blasfemas almas. Pero tambien a las mas nobles.
Era una sensación de espanto, esperando ser.
Era una premonición.
El alivio era un hecho.
La realidad áspera no bajó.
Ni los 'cafeses' imaginarios hacen magia.
Fue paz, algo como un confiado paso.
Suelo imaginar mucho, pensar mas y hablar poco de lo que implica ser.
Gato negro un martes 13.
Muchas risas un martes 13.
Suelo ser.
Me gusta así.
No es conformidad, es confianza en algo. En el hecho de ser.
De sílice a roca en cuestión de segundos (de los míos) para volver a sonreír.
Olor a fruto de la pasión mezclado con melodías.
Mucho amor para un martes 13.
Mucha familia. Gran mujer, Anita.

Repaso casiflashbackense de un cambio repentino de estado de animo en unos días.

viernes, 9 de marzo de 2012

ida

...y el viaje comenzó en el momento que nunca imaginé, y hasta el lugar mas inesperado. El primer tramo, no? Estos viajes suelen ser largos y variables. Suelen ser multifacéticos y muy cargados de sentimientos. Viajé a Madrid. Allá por los 60 y un tipo pelado demasiado sonriente le preguntaba cosas a un Julito inmortal. Que manera de escuchar que tiene, por Dios!
Era una mezcla de pertenencia universal, y de enamoramiento sistemático a medida que soltaba vocablos ''porteñoafrancesados''. El entrevistador nos colmó.
Partí extasiado para Catamarca. Llegué a las 17:05 en punto. A todo esto en Castelar era todavía de esa noche espesa como la ensalada de fruta sin bananas de mamá. En Catamarca era una tarde azul verdosa. Como no iba a ser verdosa, con tantos miles tonos de verde. El río estaba fresco en su caricia, y los coyoyos cantaban. Estaba solo y con ustedes. Que quería que estén ahí. Fue un chapuzón rápido. Unas tortillas con chicharrón y un tirón de orejas seguido a un abrazo eterno a mi prima. Me despedí con un beso de mis abuelos y emprendí vuelo.
Volví 6 minutos a Castelar para controlar la fiebre del nene. Ya está grande el nene, pero es mi consentido. Todo iba bien. Pasé a espiar a Rosita. Dormía.
En Carapachay Elian no estaba. Seguro tambien andaba de viaje.
Corté camino para Neuquén en los 80 y canté en una fogata con desconocidos hippones. No tomé alcohol, sólo me armé unos azules.
Los azules, como muchas cosas me recordaron a Bernal. Por eso me fui a mojar los pies en el mar en un tiempo no muy lejano. Con la frescura de esa arena llegué al sur de Buenos Aires. El 159 tardó bastante. Decidí volar desde la plaza. Entré por el patio. No pregunten como. Cargué el celular. Caminé el pasillito oscuro con cuidado del espejo. Miré hacia adentro y estaba mas brillante que nunca. Y así empecé a leerla.
 

miércoles, 7 de marzo de 2012

deseo

despertar el alma tuya a la medianoche con pétalos de boca y agua de caricias, de manos. Mirada en la oscuridad. Transitar el cuello debidamente y despertarte por completo. Una y otra vez y que el tiempo se detenga. Tantas veces deseo eso...

lunes, 5 de marzo de 2012

prestado

Es un Fragmento que tomo prestado de una película... de  Media noche en Paris

"Todos los hombres temen a la muerte. Es un miedo natural que nos consume a todos. Tenemos miedo a la muerte, porque sentimos que no hemos amado lo suficiente o haber sido querido en absoluto, que en última instancia son la misma cosa. Sin embargo, cuando haces el amor con una verdadera gran mujer, algo que merece el mayor respeto de este mundo, uno se siente verdaderamente poderoso y el miedo a l
a muerte desaparece por completo. Porque cuando se comparte el corazón y el cuerpo con una gran mujer, el mundo se desvanece. Los dos son la única cosa en el Universo. Tú lograrás lo que la mayoría de los hombres menores nunca han hecho, conquistar el corazón de una gran mujer, la más vulnerable cosa que ella puede ofrecer. La muerte ya no está en tu mente. El miedo no nubla tu corazón. La pasión por vivir y amar se convierten en la única realidad. No es una tarea fácil, hace falta un valor insuperable. Pero recuerda esto, en el momento que estás haciendo el amor con una verdadera gran mujer, te sentirás inmortal. "

temblorosos

lluvia en la tarde pero la noche fue tormenta de arena en el pasto sureño, con olor a mar. Con sal en el pecho. Con sudor. Con los labios lastimados. Con mucho calor, sin viento.
Abrazo fuerte, palabras. Lag. Mucho lag.
Pasto, humo, tranquilidad y un mono que se metía simpaticón. Sonrisas. Mas palabras. Pensamientos. Perdón! Intriga falsa, pero hay mas. Siempre. Mas que intrigas sorpresas. Mas que sorpresas, BesoS.

jueves, 1 de marzo de 2012

atrevimiento

el hecho de escribir implica responsabilidades (si uno se las quiere tomar). Cumplir con las reglas de ortografía, de puntuación, de concordancia. Muchos escritores no lo hacemos. (Si, me atrevo a llamarme escritor)
Yo prefiero tomarme atrevimientos. El de no respetar las relgas, por mas que soy un histérico empedernido frente a los errores gramaticales. Pero el que más me gusta (de los atrevimietos) es el de crear vocablos nuevos. Pediría perdon por tanta osadía, mas no sé a quién pedírselo.
Los lunfardos argotianos ayudan con los prefijos y sufijos añadidos a palabras ''legales''.
Un placer que me permito es el de agregar el prefijo ''casi'' a esos vocablos comunes. No voy a dar ejemplos.
Los puntos suspensivos me permiten suspirar, dudar y dejar cosas en suspenso. Me dan cosquilleos cuando los uso. Desde la zona de la cerviz a todo el cuerpo. A veces me siento adicto a ellos.
Otra adicción es la verborragia. Llegué a tirotear a personas con palabras. Suelen estar acompañadas de una dulce inspiración. Las verborragias son esporádicas pero muy intensas. Ha muerto gente con ellas, lo aseguro!
Pero el problema es uno... hoy no estoy verborrágico, ni inspirado, ni con ganas de inventar palabras, ni excitado por los puntos suspensivos.
Pero me es suficiente con mi felicidad. Atrevámonos...